INDIVIDUOS EN MASA

|
Cada vez siento que me voy quedando más sola (si es que podemos creer que hay grados de soledad, ja) y en esos instántes cuando siento que voy perdiendo personas poco a poco y una a una, no puedo evitar pensar aquellas hermosas palabras de Nietzsche que se convierten en mi único consuelo: "El individuo siempre ha luchado por no ser absorbido por la tribu. Si lo intentas a menudo, estarás solo, y algunas veces asustado. Pero ningún precio es demasiado alto por el privilegio de ser uno mismo". Y no lo es, ningún precio es demasiado alto, y menos en esta sociedad cuya meta parece ser crear "individuos" en masa, al vender una "nueva identidad" que viene con el celular que usas, con la música que escuchas o con los programas que ves.
Curiosamente (y en realidad me da mucha risa que tal vez esconde un poco de impotencia y tristeza) está de moda ser como nadie más, pero para eso tienes que ser como todos los demás. Y aquí no se esconde una de esas paradojas que me gustan, sino un terrible engaño.